¿Es mejor darme de alta como autónomo antes de fin de año, o esperar para darme de alta al mes de enero del próximo año?
Darse de alta como autónomo es una decisión importante para quienes buscan emprender su propio camino profesional. Al estar en los últimos meses del año te planteas ¿conviene hacerlo antes de que termine el año o es mejor esperar al mes de enero? Té damos algunas claves, de los pros y contras de ambas opciones para ayudarte a tomar la mejor decisión según tu situación personal.
1.Darse de alta como autónomo antes de finalizar el año
Optar por darse de alta en los últimos meses del año puede tener varias ventajas, especialmente para quienes desean comenzar a facturar lo antes posible o necesitan formalizar su situación fiscal antes de ciertos plazos. A continuación, se detallan los principales aspectos a tener en cuenta:
Ventajas:
Inicio inmediato de actividad y facturación: Si necesitas empezar a trabajar y facturar antes de que termine el año, es lógico darse de alta lo antes posible para evitar problemas legales y fiscales por trabajar sin estar dado de alta.
Posibilidad de deducción de gastos en el mismo año fiscal: Si has realizado inversiones o gastos relacionados con tu actividad profesional, al darte de alta antes de diciembre podrás deducir estos gastos en la declaración de la renta correspondiente al ejercicio en curso o deducirte el IVA si tu actividad no está exenta.
Acceso a la tarifa plana de autónomos: Si das de alta tu actividad en el último trimestre del año, empezarás a beneficiarte de la tarifa plana de autónomos antes. Esto significa que tendrás una cuota reducida en esos meses y el ahorro se extiende a lo largo del primer año completo de actividad.
Inconvenientes:
Cotización por solo unos meses, Aunque te des de alta en noviembre o diciembre, estarás obligado a pagar la cuota de autónomos por esos meses, lo que puede suponer un gasto significativo si no tienes garantizados ingresos inmediatos.
Posibles trámites fiscales adicionales: Si te das de alta al final del año, podrías verte obligado a realizar declaraciones trimestrales de IVA e IRPF por solo unos meses de actividad, lo que añade una carga administrativa que quizá podrías evitar si esperas a enero.
2. Esperar al mes de enero para darse de alta
Otra opción popular es retrasar el alta hasta el comienzo del nuevo año fiscal, es decir, enero.
Esta estrategia también tiene sus ventajas y desventajas, especialmente para quienes buscan simplificar los trámites administrativos y fiscales.
Ventajas
Comienzo del año fiscal desde cero: Darse de alta en enero permite comenzar con un ejercicio fiscal completo, facilitando la gestión de la contabilidad y las declaraciones de impuestos. No tendrás que hacer declaraciones trimestrales por solo uno o dos meses de actividad.
Optimización de la tarifa plana: Si te das de alta en enero, empezarás a beneficiarte de la tarifa plana desde el primer mes del año, lo que puede resultar en una planificación financiera más eficiente durante el primer año de actividad.
Evitar cotización sin ingresos: Si no tienes urgencia para empezar a facturar, esperar a enero puede ser una decisión más sensata para evitar pagar la cuota de autónomos en los últimos meses del año sin tener ingresos suficientes.
Inconvenientes:
Retraso en la facturación: Si ya tienes clientes o proyectos listos para ser facturados, esperar a enero puede significar perder oportunidades de ingresos o posponer pagos, lo que podría ser contraproducente.
Pérdida de deducciones fiscales en el año anterior: Si ya has realizado gastos previos relacionados con tu actividad profesional, no podrás deducirlos en el ejercicio en curso si decides esperar a enero para darte de alta.
3. Otros factores a tener en cuenta
Existen otros aspectos que también pueden influir en la decisión de cuándo darte de alta como autónomo:
Situación personal y financiera: Si tienes ahorros suficientes para cubrir los primeros meses de cotización o prefieres posponer los pagos hasta tener ingresos seguros, puede que te convenga esperar a enero.
Proyectos y clientes potenciales: Si ya tienes compromisos laborales o proyectos pendientes, darse de alta antes de finalizar el año puede ser necesario para cumplir con tus obligaciones contractuales.
Cambios legislativos: Conviene estar atento a posibles cambios en la normativa fiscal o en la cuota de autónomos para asegurarte de que tomas la decisión en base a la información más actualizada.
Conclusión
El mejor momento para darse de alta como autónomo depende de tu situación personal, financiera y profesional. Si tienes urgencia por empezar a facturar y necesitas deducir gastos de forma inmediata, quizá sea mejor darse de alta antes de que finalice el año. Sin embargo, si prefieres simplificar los trámites fiscales y evitar pagos innecesarios, esperar a enero podría ser la opción más inteligente. Evaluar todos estos factores te permitirá tomar una decisión informada y adecuada a tus necesidades.
Recomendación de los expertos de TXERPA el alta ha de ser siempre previa al inicio de la actividad, cuando hablamos de darse de alta, hablamos de iniciar la actividad.